Transformando el miedo
La gnosis es un camino tantrico donde la transformación de un elemento en otro, de una energía en otra, de una substancia en otra etc., debe de ser el modo de trabajar, en ello debemos de incluir la transformación de nuestro miedo, así como la transformación de cualquier aspecto de nuestro yo pluralizado. Nos situaremos en el miedo como ejemplo de transformación, para ello debemos primero reconocer que es el miedo; el miedo se puede definir como el aferramiento, el apego a nuestro propio yo y nuestros deseos. El miedo tiembla cuando cree que va a desaparecer algo con lo cual nos identificamos, ya sea nuestro propio yo o cualquier otro apego o deseo que tengamos. Tenemos miedo a perder el trabajo, la casa, el coche, el prestigio, tenemos miedo al “que dirán” pues perjudica nuestra auto-imagen, etc., por tanto las facetas del miedo son multifacéticas, pero su común denominador se encuentra en el apego o aferramiento; ¿Cómo entonces disolver y transformar el miedo? Primero debemos de usar la herramienta de la auto-observación que debe permitirnos dejar de identificarnos con el miedo, puesto que si no operamos con la conciencia y su auto-observación la visión del miedo no será lucida ni completa; en realidad si aplicamos una correcta ato-observación que incluye el Recuerdo de Si o recuerdo del Ser, veríamos el miedo desde la distancia, sin identificarnos con lo cual el miedo se debilita y se extingue al no recibir nuestra energía que obtiene por nuestra identificación, de tal manera que el propio miedo se diluiría o disolvería en esos momentos al verse descubierto. El miedo teme a su supervivencia ante la luz de la conciencia, para ello nuestra conciencia debe ser la luz que observe; y en segundo lugar cuando practicamos la meditación del tantra, es obvio que la misma conciencia debe estar presente, lo que significa concentración, atención dirigida sin identificación ni fascinación ante lo que se observa de ese modo podemos visualizar el miedo, siendo imprescindible en esos momentos comprender que ese miedo es como un objeto que vamos a utilizar para transformarlo, visualizamos entonces al miedo con su rostro, sus sentimientos y pensamientos característicos al mismo tiempo que percibimos que el miedo es solo apego a formas e ideas y sentimientos perecederos, por lo que el miedo no tiene consistencia ya que a todo lo que se aferra es caduco, es fatuo, es transitorio, etc. por lo que el propio apego es una mentira que no se sostiene ante la luz perpetua de la conciencia.
El tantra se conecta en dos aspectos de la doctrina: el yoga del sueño y el vacío; primero se nos enseña en el yoga del sueño que cuando somos capaces de transformar nuestras emociones también llegaremos a ser capaces de transformar los sueños, ya que el yoga del sueño trabaja en el mundo de las apariencias tanto en el estado de vigilia como en el propio estado del sueño. El mundo de las formas es un mundo de apariencias en continuo cambio, todo se transforma y todo es transitorio, siendo el mundo onírico mucho mas cambiante y aparente, todo se transfigura, a la vez que es transitorio. Y tanto el tantra como el yoga del sueño se basan en la experiencia del vacío, siendo los tres pilares del vacío: 1 la impermanencia, todo lo que nace muere. 2 la interdependencia, nada subsiste por si mismo incluyendo muestro propio ego. 3 la unidad, el yo es dual y contrario a la unidad es producto de la ignorancia, el yo crea el tu y cuando mas grande es el yo mayor diferencia con el tu; el yo es una ilusión solo es real el Ser quien sostiene la unidad.
Si comprendemos las enseñanzas del tantra o alquimia podremos percibir las carencias del miedo, es decir que toda su influencia es pura ilusión, que el miedo como el apego se basan en formas ilusorias, por tanto lo idóneo para vencer al miedo es comprender realmente cual es nuestra naturaleza, llegar a palpar la realidad del verdadero Ser en nosotros, ello eliminara toda ilusión y engaño del yo y sus miedos. Si captamos la doctrina del tantra-alquimia junto al yoga del sueño que en realidad es el yoga o practica del despertar de la conciencia, mas aplicamos el vacío, con prontitud transformaremos el miedo en un valor o atributo del Ser, este valor o virtud es inquebrantable, inmutable, tan fuerte como la misma muerte porque este valor es propio de la naturaleza del Ser.
Atentamente
Rafael Pavía. 14 - 12 – 2015.
gracias, te quedo muy bien
ResponderEliminarPoder vivir sin miedo es una alegría
Eliminar