Todo depende de cómo veamos las cosas, de cómo veamos el camino de nuestras vidas, de como veamos a nuestros amigos y enemigos, de cómo veamos nuestro pasado y nuestro futuro, todo depende de nuestra perspectiva, de que es lo que buscamos, de nuestras inquietudes, etc. Por tanto la búsqueda de la iluminación no lleva a obtener una visión clara una perspectiva lucida y bien encaminada. Hay que decir primero que no son nuestro ojos los que ven, nuestros ojos solo son un instrumento al igual que nuestro cerebro para poder visualizar determinada realidad. Cita nuestro avatar Samael a Emmanuel Kant diciendo que: “todo lo exterior es interior”. Lo que significa que un grupo de gente observando una pintura de un artista puede tener diferentes percepciones u opiniones del cuadro según la interpretación que le da cada cual, a unos les puede agradar a otros les puede desagradar y a otros les puede resultar indiferente, la pregunta seria ¿cuál es la realidad objetiva del cuadro? ¿podrían ser validas todas las respuestas o solo hay una respuesta certera sobre la pintura? Todo dependerá de cómo valoremos la opinión de cada cual, en definitiva cada cual puede percibir o ver la realidad de una manera distinta, pero en el caso de buscar la iluminación, en caso de querer encontrar la verdad no relativa si no la absoluta, entonces nos vemos obligados a indagar, investigar nuestra propia capacidad de ver, percibir, discernir, y comprender hasta el fondo como generamos nuestros conceptos e ideas. ¿Qué idea o percepción tenemos sobre nosotros mismos, sobre nuestra mente, sobre nuestro yo, ego y sobre nuestro Ser? La idea sobre nosotros mismos es producto de una teoría, creencia, de lo que otros dijeron, o es una percepción y una visión innata, propia producida por nuestra propia indagación, hemos descubierto por nosotros mismos que somos.
Abrir el ojo de la sabiduría, poder vislumbrar nuestra realidad y la realidad de nuestro entorno, requiere de un ejercicio esencial auto-observarnos. Ahora bien podemos preguntar ¿existe una realidad común a todos? Se supone que nuestra indagación nos debería de llevar a una realidad común a todos y por tanto objetiva, formulamos la misma pregunta de otro modo ¿todos los maestros de la humanidad que han despertado conciencia ven una realidad común, semejante? Será mediante nuestro auto-descubrimiento que deberemos distinguir entre una verdad relativa, circunstancial o temporal y otra verdad profunda y plena. Lo que nos es común es la verdad absoluta, mientras que la verdad relativa puede cambiar pues es circunstancial y sujeta a lo temporal. Por tanto adquirir un visión plena requiere llegar a lo mas profundo de nuestra visión, percepción, indagación, investigación sobre nosotros mismos eso es lo que han hecho todos los maestros de la humanidad que se iluminaron y despertaron plenamente su conciencia. Y viene ahora la gran pregunta ¿Cómo es posible que esa ultima verdad sea común a todos? Esta pregunta es muy importante pues es la base de todo nuestro camino y por tanto de nuestra visión, la verdad absoluta es común a todos pues su naturaleza es la Unidad consecuencia de la única ley que rige en lo profundo del Ser Absoluto el amor.
<El PROTOCOSMOS o Primer Cosmos, es infinitamente Divinal, inefable, no existe en él ningún principio mecánico, está gobernado por la Unica Ley.
Si reflexionáis vosotros profundamente sobre el Absoluto Solar, veréis que más allá existe la más plena Libertad, la más absoluta felicidad porque todo está gobernado por la Unica Ley.>
Tarot y cábala Samael Aun Weor.
Porque es fundamental adquirir la visión correcta en nuestro camino, pues porque es necesario para alcanzar nuestro objetivo, si no llegamos a percibir y ver tal objetivo en este caso al Ser Absoluto, entonces nuestra visión será relativa, personal y temporal, es decir será una visión parcial pero no común ni unitaria, por tanto sin la adecuada orientación hacia el objetivo de nuestro camino.
¿Cómo podemos adquirir esa supervisión? También es muy importante esta pregunta pues obviamente implica dejar de ver las cosas como hasta ahora las hemos visto; hemos dicho que tanto los ojos, como el cerebro son instrumentos para ver, pero quien realmente ve es nuestra mente, es en nuestra mente donde llegan las percepciones y se forman las imágenes, las sensaciones, conceptos y demás, incluso nuestra mente puede cambiar o modificar las imágenes visualizadas eso lo sabe todo meditador gnóstico y también la ciencia contemporánea, pero ahora viene la cuestión importante quien ve la mente, quien observa la mente. Es imprescindible, obligatorio para adquirir la supervisión o la verdadera clarividencia en nuestro camino descubrir al observador a quien ve la mente, es necesario indagar averiguar la naturaleza de quien observa; es decir quien esta viendo, observando nuestra mente con todos sus imágenes, proyecciones, pensamientos, sensaciones, etc., Si usted esta realmente dispuesto a averiguar quien es el que realmente debe de ver toda la actividad o dinámica de la mente, debe de participar del Silencio. El silencio, la concentración, la contemplación son las claves para que la conciencia vea clarividentemente y esta clave del silencio solo es el inicio para reconocer al observador, al que realmente ve en nosotros, quien no ha experimentado el silencio interior y la contemplación permanece ciego ante si mismo.
Atentamente:
Rafael Pavía. 9-1-2016.